El verano inolvidable

Eran las últimas semanas de junio, se acababa el cole, me esperaba un verano por delante lleno de sorpresas y de dias de pesca. Al acabar San Juan, y esos dias que te quedas en casa después de haber acabado el colegio, como cada año, me fuí a mi pueblo de vacaciones, desde Julio hasta Septiembre. Hablo de Torreblanca(Castellón) que poca gente lo conoce, pero que tiene buenas zonas de pesca. Llegué,por fin, después de un año entero deseándolo. Fueron pasando los dias,con muchas ilusiones en mis salidas. También, por fin, llegó la primera quinzena de Agosto cuando vino mi amigo Dani. Con él, cada año comparto experiencias de pesca en todas las modalidades. Una tarde que tuvimos de pesca en la desembocadura de un riachuelo, vimos a varia gente sacando anjovas. No nos lo pensamos dos veces, y al dia siguiente, allí estavamos nosotros con nuestras cañas de corcho para sacar lisas en el riachuelo y dos cañas de surfcasting preparadas con sardina. Llegamos, lanzamos las cañas de fondo con su sardina y su gameta de acero y mientras nos ponemos a pescar lisas en el río. Estuvimos un rato con las lisas, cuando de repente me giro y veo mi caña de fondo doblada como un arco y sacando hilo. Ssssssssss!
Voy corriendo, cojo la caña, y el pez sigue sacando hilo. Para, y empiezo a recuperar línea, la gente a mi lado, yo nervioso, Dani animándome... Le fuí ganando hilo, hasta que la tuve en la orilla, cerca de mí. Volvió a sacarme hilo, carrera para un lado, carrera para otro, hasta que se rindió y se quedó moribunda flotando en el agua. Fué en ese momento, cuando aproveché para sacarla con el golpe de la ola. No me lo creia, le hice unas cuantas fotos y al acabar la jornada fuí a pesarla...una anjova de 2 kg!!!